Todo el tiempo

Estaba pensando que no tengo nada nuevo para contar en mi blog, pero también estaba pensando que hay muchas otras cosas que, evidentemente, no tengo ganas de contar. Entonces me cambio de espacio y te dejo este acá, que me di cuenta que sí tenía ganas de sacarlo del horno de una buena vez.

La gente se enamora, todo el tiempo. La gente se enamora "por primera vez", también, todo el tiempo. Y como es la primera vez, piensa que quizás es la única y se abraza de ese recuerdo sin querer soltarlo, con la ilusión de querer vivirlo todo el tiempo todos los días, sin cambiarlo, como si eso estuviera bien. Y la gente también se encuentra acá, al principio del camino, exactamente después de haber cortado con su anterior relación. Porque corta y tiene toda la vida por delante, llena de nuevas oportunidades y experiencias. La gente a veces cree que está dispuesta a olvidarse de esa persona a la que le prometimos tantas cosas y tanto tiempo, hasta que sí, a fuerza de esa mentira se termina olvidando, lo deja de pensar, lo desplaza cada vez más fuerte de su cabeza. Hasta que sí, cuando lo desplaza uno ya se encuentra en el camino medio caminado. Y olvidando, la gente también mira atrás, extrañando, quizás, un poco. Extrañando, anhelando o idealizando, no se.

La gente tiene sexo, sólo para alimentar el masoquismo de aquella persona que piensa en uno. La gente se conoce, se quiere, y también se deja. La gente se rompe el corazón, mucho muy seguido. la gente se rompe el corazón sólo para recordarnos que afuera hay un mundo por vivir. Sólo para volver a contarnos la historia de que somos jóvenes y "tenemos una vida por delante". La gente se extraña, sólo porque está bien embrace your pain and feel it alive inside us, sólo para conocerse, para conocer cuáles son sus límites.

Y desde este lado de la puerta, la decisión de ser joven y tener un vida por delante, o de quedarse adentro, en este techito, defendiendo ese amor que tanto queremos y no podemos abandonar.