Un día dejé de hacer las cosas porque tenía que hacerlas y empecé a hacerlas porque quería hacerlas. No, no es lo mismo, no es parecido, no es otro punto de vista. Dejé de hacer las cosas que no quería hacer. Dije no, no quiero, no tengo ganas.
No mentí, no oculté, no tengo ganas de caretearla sólo por complacerte. No tengo ganas de hacer algo "sólo porque estoy acá".
Y me sentí bien.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
it doesn't get any better than that.
eso
<3333
Ah, mirá vos. No cualquiera puede.
Publicar un comentario